a terapia ocupacional es fundamental para el desarrollo de niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA). Ayuda a mejorar la motricidad fina y gruesa, habilidades sociales y autonomía en actividades diarias.

Los terapeutas ocupacionales trabajan con estrategias que ayudan a los niños a regular su comportamiento y emociones, mejorar su capacidad para jugar e interactuar con otros y desarrollar habilidades necesarias para la vida diaria, como vestirse, alimentarse y escribir.

Uno de los enfoques clave en la terapia ocupacional para niños con TEA es la Integración Sensorial, que les ayuda a procesar mejor la información del entorno y reducir la sobrecarga sensorial.

La intervención temprana es clave para potenciar sus capacidades y mejorar su calidad de vida.